Bajo la consigna “El mundo pudo frenar, nosotras seguimos andando”, el 8 de marzo se realizó la actividad conmemorativa y de reflexión por el Día Internacional de la Mujer Trabajadora. La propuesta fue desarrollada por el colectivo de mujeres de la UNPAZ, integrado por estudiantes, docentes y trabajadoras nodocentes con el acompañamiento del Programa de Género y Políticas Públicas del Instituto de Estudios Sociales en Contextos de Desigualdades (IESCODE) y la Oficina de Orientación y Derivación ante Situaciones de Violencia de Género (ORVIG).

El evento contó con la participación del rector Darío Kusinsky;  la directora del IESCODE, Nora Goren;  y la directora de la ORVIG, Rosana Foresti, junto a miembros de la comunidad universitaria. El diálogo estuvo organizado en base a diferentes ejes de discusión: el trabajo productivo; el trabajo reproductivo y de cuidado; el trabajo en la Economía Social, Solidaria y Popular; el trabajo en la ciencia y la cultura; y el trabajo y el contexto universitario; los cuales fueron contextualizados en el marco de los impactos sociales, laborales y económicos de la pandemia por COVID-19.

En la apertura, el rector Darío Kusinsky señaló que “esta es una agenda permanente en la que constantemente debemos estar creando y construyendo las condiciones para mejorar”. En este sentido, anunció la instalación de un lactario en la Universidad, como parte de los proyectos de financiamiento presentados al Ministerio de Educación en diciembre pasado; como así también el desarrollo de contenidos específicos vinculados con la problemática de género para la cursada del Ciclo de Inicio Universitario (CIU), que este año cuenta con más de 11 mil inscriptos.

Asimismo,  hizo referencia al lugar de los varones en la deconstrucción de la problemática de género y resaltó que “la Universidad tiene que ser uno de los lugares donde se discuta qué hacemos los varones en este proceso, los varones que queremos que esto cambie y también los que no están involucrados; cómo los hacemos reflexionar, cómo los traemos desde algún lugar”. 

Por su parte, Nora Goren adelantó que “vamos a lanzar talleres reflexivos para poder pensar y repensar los lugares que ocupamos, talleres sobre masculinidad, talleres con los trabajadores que sostienen todos los días la Universidad y con los estudiantes porque este es un largo proceso que no se agota con un ejercicio de sanción de las situaciones de violencia”.

Además, Goren destacó que “los varones son nuestros aliados, el Rector de nuestra Universidad desde el primer momento se comprometió en que si había injusticias había que abordarlas”, y puntualizó que la UNPAZ sigue sosteniendo “la orientación a las mujeres ante situaciones de violencia, por eso la ORVIG sigue creciendo bajo el compromiso de dar respuesta a toda la comunidad universitaria”.

El evento contó con un cierre musical a cargo de Sonia Abán y se confeccionó una bandera que recogió los testimonios de las participantes y quedó instalada en el edificio central de la Universidad.